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Etica e cooperativa

Participación, crédito, cooperación: ¿cómo va la capitalización?

a cura di Alessandro Messina
Direttore Generale Banca Etica

 

Querida socia y querido socio,
el 2019 es un año importante para Banca Etica: ¡acabamos de cumplir 20 años!
Y los hemos cumplido también gracias a ti.

Las 42.000 personas socias son, realmente, el motor de este banco, que desde 1999 ha crecido muchísimo, afrontando retos difíciles y formando parte del cambio hacia una sociedad más justa y equitativa. Lo hemos conseguido porque nuestras raíces son sólidas, gracias a una cultura de responsabilidad social y de sobriedad y a un buen modelo de servicio. Pero sobre todo gracias a aquella semilla inicial representada por el capital social que tú y tantas otras personas como tú habéis aportado al banco. La inversión en Banca Etica no es solamente una inversión, sino también la elección de un modelo financiero específico, que quiere decir votar con la cartera, usar el propio dinero en modo “político” para el bien común. Quien se hace socio de Banca Etica ante todo se incorpora a una idea, a un proyecto de cambio social.

El capital social, además, es importante al menos por otros dos motivos, que están en las razones fundacionales de nuestro banco:

– la participación: cada nueva persona que entra en la compañía social es un aumento de la riqueza de valores, de pasión, de conexiones con el tejido social en el que queremos operar;
– el crédito: cada euro de capital social, en nuestro modelo de operatividad, se traduce en 15 euros más invertidos en el tercer sector, en las empresas responsables, en las personas.

Por tanto, no está de más preguntarse cómo va, después de cuatro lustros, la capitalización, ya que de ella depende nuestra fuerza, la vitalidad del proyecto de finanzas éticas, el dinamismo de nuestras conexiones cívicas y sociales.

La respuesta es reconfortante: el crecimiento del capital social de Banca Etica va muy bien, no hay ninguna duda. En el gráfico siguiente se puede ver una comparación entre la evolución de nuestra capitalización y la del sistema bancario. Salta a los ojos una capacidad de captación de capital social muy superior a la manifestada por el resto del sistema bancario.

 

Fuente: Elaboración de Banca Etica sobre datos propios y de Banca de Italia.

 En particular, como se observa claramente por la distinta tendencia de las líneas después del 2014, Banca Etica ha mantenido —e incluso aumentado⎯ una capacidad de atracción de nuevos socios, o de capital adicional de las personas ya socias, incluso en un periodo histórico decisivamente poco propicio. Fueron meses y años en que, en Italia, los bancos comenzaron a quebrar, los ahorradores aprendieron el significado del llamado bail-in, muchas personas perdieron cifras ingentes de dinero por haber imprudentemente confiado en la “infalibilidad” del asesor del banco o del banquero local o precisamente porque han sido estafadas directamente por ellos. A menudo se ha tratado (pero no siempre) de bancos populares, por lo tanto, en forma cooperativa. De ello se ha derivado una crisis reputacional para todo el sector y ciertamente no se ha generado un clima favorable a la promoción y petición de nuevo capital social para la banca cooperativa. Sin embargo, muchos ciudadanos italianos y españoles han comprendido la diversidad de Banca Etica.

En referencia al último quinquenio, la siguiente figura muestra el incremento neto del capital de cada año. El 2017 ha sido el año con mayor incremento, porque estaba en activo el bonus share, es decir, el incentivo a la suscripción de acciones por el que por cada 20 acciones compradas el banco otorgaba una acción gratuita. 


Fuente: Datos en euros. Elaboración de Banca Etica sobre datos propios.

En general, la tendencia siempre es sumamente positiva y tiende a delinear un crecimiento importante, como se deduce claramente del siguiente histograma, en el que el incremento neto anual del capital social correspondiente a los últimos 12 años se indica con los valores absolutos y la media del periodo.

Fuente: Datos en euros. Elaboración de Banca Etica sobre datos propios.

Detrás de los millones de euros, lo sabemos bien, siempre están las personas, con su historia y su proyecto de vida o de cambio del mundo hacia ideales de justicia y paz. Estamos hablando de miles y miles de personas: también en 2018 cerca de 1.000 nuevas personas socias se han unido a nuestro proyecto, casi 5 por cada día laboral.

A 31 de diciembre de 2018 los socios eran más de 42.500, entre personas y organizaciones. A continuación, se detalla la evolución global en estos cinco años:

Fuente: Elaboración de Banca Etica sobre datos propios.

El número total de socios, como se observa, está en constante aumento.

Por lo tanto, no solo en términos de “euros captados”, sino también considerando las personas implicadas, se confirma el atractivo del proyecto de Banca Etica, capaz de generar con constancia nuevas y adicionales suscripciones suficientes para compensar las normales dinámicas de ventas y cancelaciones de una base social cada vez más amplia.

Las ventas se producen cuando, por diversas razones, algunos socios ya no desean ser propietarios de las acciones de Banca Etica. Para dar la oportunidad a estos socios de liquidar sus acciones, se ha constituido en el banco un Fondo de Readquisición de Acciones Propias, en los límites autorizados por las autoridades de supervisión. Las acciones “vendidas”, por lo tanto, no disminuyen el capital social de la sociedad, sino que son vendidas provisionalmente al banco y posteriormente reasignadas, es decir, vendidas a otras personas u organizaciones que desean hacerse socias por primera vez o que quieren aumentar su cuota accionarial.

Los dos gráficos siguientes ilustran este fenómeno.

Fuente: Elaboración de Banca Etica sobre datos propios.
 

Para representar de un modo diferente el mismo fenómeno, la siguiente figura evidencia una “tarta” en que la porción pequeña expresa el porcentaje de acciones vendidas en el último año, que es igual al 2% del total.

 

Fuente: Elaboración de Banca Etica sobre datos propios.

Todas estas cantidades han sido reasignadas en el transcurso del año. Para expresarlo con otras palabras, el valor del capital social de estas acciones no se ha “perdido”, sino que ha “pasado de mano” de un socio “vendedor” a otro socio “comprador” mediante el Fondo de Readquisición de Acciones Propias del banco. En términos de capacidad de estímulo del capital social, estos importes “reasignados” se añaden al “nuevo” capital social captado.

Otro dato relevante es el relativo a las cancelaciones, es decir, la “renuncia” a la acción y su consecuente “anulación” con la relativa disminución del capital social. Esto está previsto por el marco normativo y por los Estatutos solo en algunas circunstancias:

– en caso de sucesión en que los herederos no desean estas cuotas accionariales y, por tanto, las acciones del causante son anuladas;
– la exclusión de la persona socia o por la cual tenemos depositadas acciones “durmientes” y por las que, conforme con la ley, el banco debe transferir el contravalor de los instrumentos financieros retenidos al fondo público de acuerdo con el art. 1, párrafo 345, de la Ley núm. 266, de 23 de diciembre de 2005.

Con el foco en el 2018, se deduce que el porcentaje de este capital sobre el total de las acciones del banco es igual al 0,1%.

Fuente: Elaboración de Banca Etica sobre datos propios.

En resumen, Banca Etica sigue atrayendo a nuevos socios y demuestra que es capaz de gestionar de un modo ordenado y eficiente la natural necesidad de “intercambio” de las mismas personas socias, con un mecanismo ⎯el Fondo de Readquisición de las Acciones Propias⎯ que se presta de manera óptima a la doble función de sustituir un “mercado secundario” de las acciones (no siendo el banco cotizado) y de favorecer una plena facultad del derecho fundamental de asociación, de entrada y de salida.

La intacta capacidad de atracción de nuevos socios, asociada a la satisfactoria rentabilidad de la actividad ordinaria, que genera beneficios a su vez reinvertidos en el patrimonio del banco, permite poder afirmar que la inversión en Banca Etica es sólida, continuada y duradera.

¡Gracias a todos aquellos que lo hacen posible y a las personas que pronto se nos unirán!

Alessandro Messina
Direttore Generale Banca Etica