Entrevista al Comité de Ética de Banca Etica

En el Día Internacional de la Mujer, hacemos algunas preguntas al Comité de Ética de  Banca Etica para profundizar en el tema de la igualdad de género en las finanzas éticas. Un debate abierto en nuestra organización que cada día enriquece los proyectos.

El tema de la igualdad de género está en el orden del día desde hace décadas. ¿Por qué sigue siendo importante en estas fechas insistir en ello?

A pesar de los muchos derechos que las mujeres han ido adquiriendo a través de acuerdos internacionales o de las leyes de sus propios estados en el siglo pasado, y en este que acaba de empezar, en la práctica aún no se ha conseguido la igualdad de género.

Un indicador de lo mucho que queda aún por hacer es, por ejemplo, el hecho de que una de cada tres mujeres en el mundo (en particular en Europa), sufre alguna forma de violencia de género. Si hubiéramos alcanzado la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres, los hombres no se atreverían a recurrir a la fuerza para obligar a las mujeres a vivir una vida basada en el miedo y la violencia.

Desde el punto de vista económico, si tuviéramos garantizada la igualdad de oportunidades no tendríamos cumbres exclusivamente masculinas, puestos de alta responsabilidad solo ocupados por hombres, una diferencia salarial entre mujeres y hombres con cargos equivalentes con oscilaciones del 15 al 40%, ni notable diferencia entre los porcentajes de mujeres y hombres desocupados y, además, los hombres cogerían una baja por paternidad equivalente al de las mujeres.

¿Cuál es el nexo entre el 8 de marzo y el mundo económico-financiero?

Cualquier economía y cualquier sistema financiero funcionaría mejor si el potencial femenino tuviera reconocimiento: es una cuestión de cómo se mira el mundo. Las organizaciones con sus jerarquías, sus jergas, sus ritmos, se han ido construyendo en masculino. Nos hemos acostumbrado a una determinada división y organización del trabajo que podría mejorar y ser más humana si hubiera un mayor número de mujeres en los puestos de toma de decisión.

El mundo de las finanzas también tendría más talla humana: muchas investigaciones demuestran que las decisiones financieras de grandes empresas con cuotas de mujeres en el poder son más racionales cuando el equipo directivo es plural, característica que resulta de gran ayuda en momentos de crisis.
Asimismo, la discriminación de género que afecta al ámbito laboral y familiar incide también en la capacidad financiera de las mujeres respecto a la de los hombres: renta percibida, capacidad de consumo y de inversión, percepción de la pensión, propiedad, instrumentos para afrontar los procesos de empobrecimiento,etc.

La igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres es un factor clave de la economía y del sistema financiero inclusivo e “inteligente” que puede apoyar y aumentar el crecimiento económico y el progreso social de la sociedad en su conjunto, sobre todo en países que viven momentos de crisis estructural como Italia y España.

Los estudios demuestran que las organizaciones pueden llevar a cabo transformaciones en términos de atención a la cuestión del género si éste se convierte en un objetivo estratégico y se emprenden caminos de sensibilización y conciencia que rompan la dinámica de enfrentarse al fenómeno con irrelevancia y superficialidad.

Por este motivo, el Comité Ético ha querido plantear este tema al Consejo de Administración y a Banca Etica en su globalidad, para reflexionar y convertirlo en un tema que conduzca a un crecimiento consciente de todas las personas.

Banca Etica tiene entre sus rasgos distintivos trabajar para integrar la igualdad de género ¿Cómo se articula este empeño?

Por sus orígenes, por su constitución y por su misión, Banca Etica siempre ha concedido mucha importancia a estos aspectos. Como Comité Ético creemos que este es un momento favorable para Banca Etica para sistematizar las intuiciones y las atenciones que le caracterizan sobre el tema de la igualdad de género.

En esta óptica es indispensable y estratégico continuar trabajando para concienciar a todas las personas sobre estos temas, así como sobre la dirección y los instrumentos innovadores de gestión del crédito.
En los últimos años se ha intensificado la atención sobre el tema de la igualdad de género, el Consejo de Administración ha iniciado un debate con las trabajadoras y trabajadores, socias y socios, y además ha estimulado una profundización del análisis a cargo del Comité Ético.

Creemos que tener mujeres en posiciones de mando no significa aplicar cambios en las políticas y en los procesos operativos de un Estado, ni siguiera de un banco. De nada servirá, si no se acompaña de una voluntad política y una voluntad operativa común para conceder mayor atención a la igualdad de género y a las diferencias. Es tan infrecuente tener hombres aliados que comprendan la importancia y tener el apoyo para perseguir políticas de género respetuosas con las diferencias y con las oportunidades para todas y para todas, como lo es tener mujeres en posiciones de mando, empoderadas y capaces de aplicar una transformación en un sistema bancario o de cualquier otra naturaleza. Banca Etica tiene todo el potencial necesario para marcar la diferencia, también en temas de igualdad de género.

¿Cuáles son los obstáculos que más frenan el alcance de la paridad efectiva entre mujeres y hombres, incluso en un entorno avanzado como es el de las finanzas éticas?

El análisis que hemos efectuado por mandato del Consejo de Administración (elaborado en particular por dos mujeres miembros del Comité Ético: Simona Lanzoni y Alessandra Smerilli) tiene por objetivo demostrar que se pueden poner en valor la diversidad y la diferencia para un futuro mejor, realmente inclusivo para mujeres y hombres.

Reflexionar sobre cómo los estereotipos, los comportamientos discriminatorios basados en el género y en las consecuencias de siglos de historia en que las mujeres han estado por detrás de los hombres son temas que deberían formar parte del bagaje de todos los trabajadores y trabajadoras de Banca Etica, porque permitiría tener una escucha distinta con los clientes, en decisiones de marketing dirigidas a las distintas necesidades y en la propia organización y trabajo del banco.

No se trata de crear mundos de color rosa ni productos para mujeres, sino de analizar, pensar, ver y actuar teniendo en cuenta la complejidad que deriva de que el mundo esté compuesto por hombres y mujeres que ganan, ahorran e invierten de manera distinta. La igualdad de oportunidades y de derechos pasa por el reconocimiento y la aceptación de las diferencias, sin que estas se transformen en estereotipos.

¿Cuáles son los próximos pasos que veremos en Banca Etica?

El Consejo de Administración ya ha marcado los próximos temas en su agenda:

• Iniciar un debate sobre el lenguaje de género.
• Implicar a los miembros de la Global Alliance for Banking on Values en un debate abierto sobre el tema de la movilidad y la inclusión entre géneros y generaciones.
• Reactivar un debate permanente entre órganos de gobierno, personal y base social del Gruppo Banca Etica.